Consejos para decorar un piso de alquiler
Nada mejor que entrar en un hogar acogedor después de un largo día de trabajo. En España tenemos una fuerte tradición de la propiedad, pero cada vez son más quienes optan por un alquiler. Por supuesto, todo aquel que se aloje en un piso alquilado no debe perderse esta sensación de satisfacción.
Darle tu propio toque a un lugar es una parte esencial para convertir una casa en hogar, y muchos propietarios adoptan un enfoque relajado cuando se trata de que los inquilinos decoren su propiedad de alquiler.
Independientemente, es aconsejable conversar con el propietario para obtener su permiso al realizar cualquier pintura o cambios permanentes. Muchos propietarios solicitan que la propiedad se deje igual que cuando se mudó, especialmente si tienes un contrato a corto plazo. Sin embargo, otros estarán felices de que realices cambios que mejoren la propiedad.
Empieza por las paredes
El primer paso es pensar en las paredes. Como ya hemos dicho, pídele permiso a tu arrendador para pintar sus paredes de un bonito color neutro. Si los propietarios son inteligentes, comprenderán que solo deseas mejorar la propiedad y que la situación es beneficiosa para todas las partes. Si el propietario dice que las paredes deben ser blancas, siempre puedes volver a pintarlas cuando acabes tu contrato de arrendamiento (puedes pintar solo una pared en un lugar prominente, así le habrás dado tu toque y solo tendrás que pintar una pared cuando te vayas).
Crea una galería de marcos de fotos y arte: el arte es una manera fácil de darle vida a un espacio y definitivamente hará que tu alquiler sea como tu hogar. Tendrás que arreglar los agujeros cuando te mudes, pero en paredes blancas no te llevará mucho tiempo. También puedes utilizar otros métodos de alta resistencia para colgar arte… ¡así que esa también podría ser una opción si los agujeros de los clavos te asustan!
Invierte en piezas duraderas
¿Solo piensas en Ikea cuando te hablan de decorar un piso de alquiler?
El hecho de que estés de alquiler no significa que tengas que vivir con muebles de tus días de universitario.
Muchas personas asumen que lo que compren ahora no encajará en su futuro hogar, por lo que viven con piezas que odian. Tal vez no deberías comprar una mesa de comedor para 10 personas pero, ¿por qué no comprar una mesita de noche, una lámpara o una cómoda que te encante? Si adoras una pieza, encontrarás espacio para ella en tu próxima casa.
Utiliza alfombras
Si el piso tiene los suelos antiguos o rayados, puedes cubrirlos con una alfombra a tu elección. Las alfombras son excelentes piezas de inversión y hacen que cualquier espacio se vea mucho más completo. Además, son cómodas para tus pies y absorben el de ruido. ¡Tus vecinos te lo agradecerán!
Modifica los pequeños detalles
- Cambia los accesorios de la cocina y del baño: guarda en una bolsa los accesorios viejos para intercambiarlos cuando sea el momento de mudarse.
- Elige nuevas cortinas.
- Compra algunas plantas o suculentas.
- Agrega color con almohadas y mantas.
- Diseña una estantería con tus lecturas, fotos y recuerdos favoritos de tus viajes.
- Agregar un carrito de bar.
- Invierte en ropa de cama de calidad.
Ya seas un inquilino de por vida o solo temporal, creemos que tu casa es un lugar para reunirse y crear recuerdos, ¡muéstrale un poco de amor a tu hogar!